La presentación estuvo a cargo de las Convencionales Alondra Carrillo y Giovana Roa en relación a los principios de valor del trabajo, y el principio de la participación social que busca que las organizaciones sociales, en especial la de las organizaciones sindicales, participen de la vida en comunidad en forma vinculante para el Estado.

Fueron realizadas por la Comisión las normas sobre centralidad del trabajo que permite construir las bases de la vida en común. Pero no cualquier trabajo, sino que el trabajo digno que permita el desarrollo integral de las personas. Asimismo, derivado de lo anterior, el derecho de las y los trabajadores a organizarse en sindicatos, de negociar colectivamente y que cuenten con una huelga efectiva, lo que se traduce en el principio de la Libertad Sindical, como una herramienta efectiva para que trabajadoras y trabajadores defiendan sus intereses. Por ser contrario al principio de trabajo digno, se establece la prohibición a empleadores de instalar el trabajo precario, desalentando la subcontratación y el empleo informal.

Asimismo, se presentaron las normas sobre participación social, señalando la obligación del estado de la participación de organizaciones como asimismo la remoción de los obstáculos que la impiden. Para ello es imprescindible contar con educación cívica.

Se rescata especialmente, el proceso del cual nace esta iniciativa, que deriva de encuentros donde participaron más de 100 dirigentes sindicales de diversos sectores, portuarios, mineros, retail, funcionarias y funcionarios públicos, y que también se abrió a otras conexiones de la sociedad civil como académicos, asesores sindicales, organizaciones feministas y que se levanta en forma democrática con la participación de quienes han tenido la experiencia real de vivir en este país.

Estas normas fueron aprobadas por la Comisión de Principios e incluida en el texto sistematizado que contiene las normas aprobadas por dicha Comisión en los artículos 5K y 24 de su propuesta al pleno.